El momento de contacto, ese instante en que se encuentran
uke y tori es importante para la ejecución de la técnica, ese contacto debe ser
exacto para la ejecución de la técnica, para que se logre lo que se pretende
hacer. La técnica es ahora, pero ¿se puede construir el ahora? Es decir, para
hacer la técnica se necesita un conocimiento previo, un plan, todo un estudio
sobre su ejecución.
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coordinación defensa-ataque |
He aquí una paradoja del Aikido, porque para hacer una
técnica de Aikido se requiere conocimiento, hacer uso de la mente, y la mente
esta fuera del ahora. ¿Cómo así? La mente funciona gracias al tiempo, el
cerebro, como lo determina la neurología, emula lo real, no la percibe en su
totalidad, sino que la reconstruye en su sistema neuronal tras el filtro de la
percepción. Para ello requiere de conocimiento previo de las formas, colores, olores, etc. que ha
percibido antes: necesita del recuerdo, del pasado, para percibir y hasta
anticipar o predecir el mundo de ahora para responder adecuadamente a los
estímulos externos. Entonces percibe por el pasado y anticipa lo que sucederá
en el futuro inmediato, es decir, cuando veo a mi compañero levantar la mano
para hacer un shomen uchi, ya mi cerebro tiene información de lo que está
sucediendo, tal que puedo interceptar y salir de la línea del ataque. Para eso
es que se entrena a diario, para que el conocimiento se vuelva en instinto,
para no pensar en la acción, solo actuar.
El Ahora, en Da Ai, el momento justo no es posible sin el Ma
Ai, la distancia justa, el espacio que se ocupa, es aquí y ahora la existencia
y las circunstancias que los construye, que hace que exista, se genera al
instante mismo, takemuso aiki, la técnica se concibe en el instante mismo que
sucede desde la semilla del instante previo que lo engendró. Es algo que se
lleva dentro y sale a la luz, como el nacimiento de un niño, como una idea,
surge, no de la nada, sino del saber que da el entrenamiento, el conocimiento
que se ha cultivado en años de práctica surge al momento mismo de hacer la
técnica. Así que el momento justo es ahora, cuando estoy escribiendo o leyendo
estas palabras, cuando estoy alimentando mi mente y ha de surgir al momento de
hacerle frente a un conflicto, a un agresor, a un compañero. Después de todo,
la práctica no es solo es física cuando estoy en el tatami, también es mental
cuando pregunto al maestro, cuando investigo en
libros, cada acción encaminada al crecimiento personal es el momento
justo para cuando se ha de aplicar una técnica, todo es ahora, no hay otro
tiempo.
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