viernes, 24 de abril de 2020

RESPUESTAS A UN ATAQUE VERBAL


Ante un agresión física de parte de alguien las opciones de responder a ello es de lucha o huida, o tal vez nos quedemos paralizados al no saber cómo actuar en esos casos, que es lo que casi siempre sucede a la mayoría de nosotros. Sin embargo en nuestra época y sociedad es más frecuente ser agredidos de modo verbal, a lo cual también tenemos reacciones diversas más o menos similares al combate cuerpo a cuerpo o de escapar de tal situación, que por lo general no es adecuado en tanto que el malestar persiste.

La respuesta que se considera más común es responder la agresión con agresión, es decir, entrar en una lucha con el otro, contra atacar. Por supuesto esta reacción no solo es inadecuada, sino que puede escalar el conflicto a situaciones dañinas y lamentables para las partes.

Otra respuesta considera común y un poco más adecuada es huir. Escapar, alejarse de la persona agresiva puede ser una solución cuando el agresor es algún desconocido en la calle, por ejemplo en un incidente de transito sin consecuencias, los insultos salen de su boca por considerar que él tenía la prioridad en la vía o algo semejante, pero si el caso es con alguien conocido que vemos con frecuencia es otra cosa, un compañero de trabajo por ejemplo, la huida la interpretará como que tiene poder dominante sobre uno y se volverá un compañero acosador posiblemente si solo lo evitamos sin ponerlo en su lugar, es decir, si no defendemos nuestros derechos.

Pero una reacción común es paralizarnos ante la agresión verbal, cada vez que alguien nos maltrata verbalmente de sorpresa nos deja atónitos y sin nada que decir, luego de lo que ha pasado nos imaginamos cientos de respuestas que deberíamos haber dicho, pero ya no tiene sentido y el malestar persiste.

Ante los ataques verbales también el agredido puede justificarse. La justificación es solo una argumentación de mi posición o acciones donde los actores de la discusión raramente están dispuestos a escuchar o recibir información del otro, realmente es una resistencia a comprender lo que el otro el otro expone en la discusión y no estamos escuchando sus argumentos.

Tal vez en las discusiones incomodas también uno de los actores trata de desviar la atención sobre el tema, lo cual más bien empeorará la situación porque el compañero lo interpretará como un intento de engaño, evasiva o minimizar la discusión. Eso no es conveniente y se volverá más difícil llevar el conflicto.

al hacer irimi tenkan quedamos en la
misma dirección que mira uke
La respuesta Aikido es una respuesta empoderada, en la que se toma una distancia emocional e intelectual (no tomarlo de manera personal) a las palabras del compañero y se hace un “irimi” hacia el punto de vista de él, es decir se entra a su esfera vital para comprender cuál es su punto de vista al acompañarlo desde allí (empatizar) y juntos encontrar una solución.

Para desarrollar una respuesta Aikido se debe, entonces, entrenar la respiración para centrarnos y los desplazamientos irimi tenkan (entrar y girar), para entrar al punto de vista del compañero y empatizar para encontrar la vía juntos.

1 comentario:

Anónimo dijo...

en estas fechas, es dificil huir por la cuarentena,
Hacinados sin poder huir de la locura propia.

¿Es el Aikido un arte marcial meramente defensivo?

 Cuando yo empecé a practicar artes marciales, más exactamente Taekwondo, mi profesor solía decir que “deberíamos usarlo únicamente como def...