martes, 17 de julio de 2012

DEFENSA CONTRA LOS ATAQUES VERBALES 2



Las técnicas que vimos en la primera parte consiste en respuestas de esquiva y evitación para no implicarnos en discusiones inútiles que desgastan la energía y el buen sentido, sin embargo hay situaciones que no es tan sencillo escapar y debemos responder con mayor energía para neutralizar el ataque, debemos impactar al contrincante para paliar la situación, en tal caso nos encontramos con estas estrategias:
Ceder y consentir es una estrategia para cuando los ataques han sido constantes y estamos hartos de tales, de tal manera que le damos la razón siempre y cuando esto no nos perjudique. Es decir esto se aplica cuando somos objeto de burlas, como por ejemplo de nuestra apariencia. De esta forma estamos aceptando nuestra persona a pesar del punto de vista de demás.
Sin embargo, en ocasiones se debe ceder y defender nuestra postura, insistir en nuestro punto de vista, en este caso estamos neutralizando la agresión con una actitud comprensiva del punto de vista del agresor y nos mantenemos firmes en nuestro punto de vista del asunto en cuestión.
El cumplido, se aplica cuando note que el otro tiene cierta ínfula de superioridad, de tal manera que nunca se nos ocurriría admirarlo, de ahí su poder, porque es una respuesta inesperada y la cual no se puede rechazar, sobre todo si la hacemos con toda la seriedad del caso.
La réplica desintoxicante consiste en preguntar sobre las palabras ofensivas que nos han lanzado o callarlo con sugerencias como que las opiniones y comentarios están reservados para el final de la presentación. En el primer caso, estamos obligando al agresor a pensar sobre su comentario y de paso nos da un respiro para reaccionar de manera adecuada a la situación. En el segundo estamos defendiendo nuestro derecho a la palabra cuando la tenemos ante un auditorio
La constatación objetiva consiste en no dejarse contaminar del ánimo del otro y tener la capacidad de hacerle notar que hemos percibido su malestar, además que estamos dispuestos a proseguir una discusión objetiva y clara sobre el tema que estamos tratando.
La confrontación es una técnica que exige tener aplomo y mucha maduración de las técnicas aquí mencionadas, sobre todo de mantener el buen ánimo y reconocer los propios errores que de pronto han provocado el ataque. En este caso nos armamos con una actitud autoritaria y hemos de exigir una disculpa, repitiendo las palabras que nos han dicho y recalcar las palabras ofensivas.
Hablar claro, consiste en no responder a la ofensa sino en referirse al trato que esta recibiendo y al comportamiento de su agresor de manera clara y precisa sobre que es lo que nos ofende.
Por último, definir las reglas de juego consiste en encauzar la discusión en el tema a tratar recalcando que el ataque recibido no viene al caso.
Estas son defensas contra los ataques verbales donde hemos contra atacado con asertividad y claridad ante la agresión, aplicando aikido en el sentido de evitar daño alguno a nuestro agresor mientras evitamos ser lastimados por él.
En la próxima entrada hablaremos de los primeros auxilios y sobre las estrategias para esclarecer conflictos que vienen de tiempo atrás y nos tienen en un ambiente pesado en nuestro lugar vital.

1 comentario:

Germán Forero dijo...

Hola
Muy apropiado sobretodo cuando a diario debemos enfrentar situaciones estresantes y en las cuales no debemos explotar.

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